23 de mayo de 2008

Herencia China

por Eugenia Segura



budismo occidental

El secreto de la quietud consiste
en mirar una montaña
y desearla intensamente,
durante años,
hasta que venga hacia vos,
te desconcentre
porque la habías olvidado y ya estabas
deseando otra cosa.



materia

ha de ser una ley: ningún ser puede treparse a sí mismo. enuncio la disolución del agua en el agua al final de la cascada, dedos que arañan el muro transparente de tal desasosiego. mirar hasta extraviarse en el intento, una con la tortura constante de subir una materia idéntica siempre en estallido. no tienen paz las aguas.



la nieve

árboles, arbustos
hilados a las nubes por la escarcha

intervalo de sangre en la ruta:
cuatro perros blancos comen
el cadáver de un caballo blanco.

para entender la muerte sus cachorros
miran las ruedas huelen
nuestro rastro
para entender la vida la velocidad el intervalo
en la perra ruta nos resumen:
dos muescas en el barro.


***



sentada en la piedra imagino
el peso del agua
horadando el arroyo hasta dejar
un hueco exacto, a la medida
de mi cuerpo nuevo

van a pasar años, pensé,
hasta que parezca
veloz y peligroso como el otro.
un día dará espuma, es mi primer
proyecto a largo plazo y me estremezco
porque sé de lo que hablo:
hundirme
en esa masa de hielo líquido y nervioso
que duele lo que un disparo y deja
el cuerpo anestesiado, prescindible
de todo menos de la fuerza
que el agua trae consigo y que presiona

cuando soy
idéntica al palito, a la hojarasca
que pasa, de la misma
materia que me lleva, voy
hacia la orilla, dejo
que el sol me sobreviva.


***


Eugenia Segura nació en Mendoza, en 1978. Integra la Antología de poetas argentinas (1961-1980) publicada en 2007 por Ediciones del Dock. En 2005 publicó "La traición de Sarah Kay". "Herencia China" es su libro de próxima aparición.

3 comentarios:

@alebargo dijo...

me conmovió la nieve, (hilados a las nubes por la escarcha)una historia en una imagen, me gusta eso.
muy bueno

Eliana dijo...

es un placer tener a eugenia en nuestra tierra de sol y buen vino. su palabra cruje cada vez que levanta sus ojos. gracias por difundir a escritoras mendocinas.
los invito a visitar mi blog www.17libelulas.blogspot.com

Nurit dijo...

Que lindos poemas.
El primero sobre todo!
Hay algo que se asemeja bastante a Juan L., especialmente los leídos el domingo en la presentación del interpretador.